Descubre cómo funciona una cadena de suministro
¿Qué es la logística inversa? Tendencias 2024
Eventualmente, la cadena de suministro no termina con la entrega del producto al cliente final. Pensemos, por ejemplo, en las mercancías que no cumplen las expectativas del comprador. En este y en otros casos, procede que el artículo retorne al lugar de donde procede.
Decimos que la logística o distribución es inversa (reverse logistics) cuando la mercancía regresa a su origen desde su destino. Ergo, como su propio nombre indica, se trata de un proceso logístico que gestiona el flujo inverso al que siguió el producto para ser entregado.
Este proceso constituye la última etapa de la supply chain y va mucho más allá de la logística de devoluciones. De hecho, también puede obedecer a una entrega fallida o a la necesidad de reparar o reciclar el producto enviado. Consecuentemente, afecta tanto a la satisfacción del cliente como a la sostenibilidad.
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ContáctanosVentajas de externalizar la logística inversa
Cuando se gestiona correctamente, la logística inversa reporta notables beneficios a las empresas. Es por ello que la mayoría de negocios hilan muy fino a la hora de elegir el operador logístico que llevará a cabo esta tarea.
Promueve la sostenibilidad medioambiental
Lejos de ser una moda pasajera, la concienciación medioambiental ha llegado a nuestros hogares y empresas para quedarse. En este punto, conviene recordar que la sostenibilidad encuentra en la retrologística a una de sus más firmes aliadas.
Esta etapa de la cadena de suministro tiene varias formas de cuidar del planeta:
- Reparar un producto es más ecológico que fabricar uno nuevo.
- Posibilita reciclar mercancías que ya no sirven y aprovechar componentes que aún siguen siendo útiles.
- El retorno de la mercancías a su punto de origen puede gestionarse de la forma menos contaminante posible, por ejemplo, mediante optimización de rutas.
Ahorra dinero y optimiza recursos
El reciclaje de mercancías, además de ecológico, ahorra una buena suma de dinero a las empresas. Al fin y al cabo, aprovechar materiales siempre sale más barato que comprar nuevas materias primas.
Cuando hablamos de distribución inversa, el ahorro económico también se manifiesta en la reducción de pérdidas. Ciertamente, la reutilización de productos y envases combate el derroche y nos ayuda a exprimir cada euro que invertimos en el proceso logístico.
Impulsa el branding corporativo
Toda empresa con la logística inversa bien gestionada es percibida como más eficiente y confiable. Semejante refuerzo para su imagen corporativa resulta de gran ayuda a la hora de mejorar sus relaciones tanto con clientes como con proveedores y socios.
Refuerza el control del stock
La logística de retorno requiere invertir más recursos para llevar un férreo control de nuestras existencias a través de una planificación rigurosa. Eso sí, satisfacer ese mayor nivel de exigencia da como resultado reducir el margen de error y gastos innecesarios.
Te ayuda a conocer tus productos
La última fase de la cadena de suministro nos brinda una valiosa fuente de información acerca de las mercancías que comercializamos.
Ello es especialmente aprovechable en el caso de la logística de devoluciones, pues nos permite analizar aspectos cruciales para mejorar nuestros productos. Cuando sepas qué producto se devuelve más y por qué, estarás más cerca de evitar que esto suceda en el futuro.
Mejora la experiencia del cliente
Existen muchos ejemplos de logística inversa que demuestran cómo ayuda su gestión a fidelizar a los clientes. Como compradores, incluso cuando un producto no ha sido de nuestro gusto, agradecemos que la logística de devoluciones funcione de forma rápida, flexible y sencilla. ¿Se te ocurre mejor forma de aprovechar la adversidad en tu propio beneficio?
Todos sabemos el alto nivel de exigencia que tienen quienes hacen sus compras online. Dicho rigor recalca el papel decisivo que juega la logística inversa en el ecommerce. Después de todo, de ella dependen aspectos tan sensibles como la tramitación rápida y la gratuidad.
Ofrece nuevas oportunidades de mercado
La reutilización de mercancías es uno de los pilares sobre los que se sustenta la economía circular. Se trata de una poderosa tendencia, muy ligada a la sostenibilidad, que abre nuevas posibilidades a las empresas dispuestas a ampliar su nicho, incluyendo operaciones de reparación y reacondicionamiento.
Optimiza la cadena de suministros
Como es lógico, economizar costes y recursos redunda poderosamente en aumentar la eficiencia de la supply chain. Ciertamente, una buena gestión de la logística inversa se traduce en mejorar su funcionamiento mediante el ahorro de tiempo y dinero.
¿Cómo funciona exactamente la logística inversa?
Lo cierto es que la logística inversa no siempre funciona de la misma manera. A fin de cuentas, los procesos que la integran variarán según la mercancía a transportar y la empresa. No obstante, y para que te hagas una idea, aquí te mostramos la forma más frecuente de proceder en este ámbito.
Recogida de la mercancía
Lógicamente, esta etapa logística comienza en la última etapa de la supply chain y consiste en retirar la mercancía del que fuera su lugar de destino. Por lo tanto, es necesario recogerla para llevarla desde el cliente final hasta la empresa que la remitió.
Clasificación
Con el fin de optimizar las etapas ulteriores, conviene clasificar las mercancías retiradas. De este modo, la empresa lo tendrá más fácil a la hora de decidir qué destino les dará según los casos (reciclaje, destrucción, desmontaje, venta, etc.).
Reaprovechamiento
Procede desarrollar esta fase cuando el artículo es susceptible de reutilización, pero aún no está listo para su distribución inmediata, ello es particularmente frecuente en ciertos tipos de bienes. Para que vuelva a estar en óptimas condiciones será necesario llevar a cabo la operación correspondiente, a saber: reacondicionado, reciclaje o reparación.
Restitución al almacén
Cuando la mercancía presenta condiciones idóneas para su distribución, se envía de nuevo al almacén de origen. Allí, previo inventario, se gestionará su envío a nuevos canales de venta.
Destrucción de productos inservibles
En ocasiones, las mercancías quedan completamente inservibles. Ello puede suceder por la imposibilidad de reutilizarlas o porque su reventa no resultaría rentable. Sea como fuere, en tales casos se procede su reciclaje o, como último recurso, a su eliminación. Igualmente, será imprescindible usar metodologías de destrucción seguras si los materiales a procesar fueran peligrosos.
Aprovechamiento de componentes
El método de destrucción de las mercancías consideradas inútiles siempre debe priorizar la rentabilidad. Es por ello que tales procesos tienden a recuperar la mayor parte de sus componentes, para convertirlos en nuevas materias primas en caso de que sea posible. Esta posibilidad, conocida como posconsumo, es habitual en aquellos productos que pueden ser parcialmente reutilizados.
Donación de mercancías
La empresa también puede donar sus productos no vendidos a instituciones benéficas. Esta posibilidad, aunque no aporte beneficios económicos directos, impacta de forma muy positiva en su reputación.
Trámites burocráticos
Las tareas de logística inversa no solo implican gestionar mercancías, también es necesario cumplimentar los pertinentes trámites burocráticos. Así, se hace necesario documentar en cada caso cuáles fueron las operaciones logísticas y cómo se llevaron a cabo.
Desafíos de la logística inversa
Aunque la logística inversa trae consigo numerosos beneficios cuando se gestiona adecuadamente, conviene recordar que también plantea bastantes retos. Trabajar con un operador logístico que esté a la altura de las circunstancias será decisivo para salir al frente de estos desafíos y aventajar a nuestros competidores.
Control de calidad
La logística de devoluciones tiene como principal desafío el tener que controlar el estado en el que se encuentran las mercancías devueltas. Esta labor de supervisión manual debe ser exhaustiva para evitar fraudes y garantizar que el producto se revenda en óptimas condiciones.
El problema de la rentabilidad
No podemos olvidar que repetir todo el proceso logístico hacia atrás supone duplicar unos costes operativos que ya se hicieron para enviar la mercancía. Así las cosas, deberemos equilibrar ese sobrecoste para que el proceso no deje de resultar rentable, a fin de seguir ofreciendo unos precios competitivos.
En ocasiones, poner en marcha toda la maquinaria del retorno logístico no merece la pena. Se trata de aquellos casos en los que lo devuelto es tan irrisorio que su reciclaje o reutilización resultarían antieconómicos.
Coordinación interdepartamental
Que una mercancía deba volver sobre sus pasos es algo que incumbe a varios departamentos de la empresa: SAT, soporte técnico, finanzas, ventas y logística (salvo que esté externalizada). Coordinar adecuadamente la intervención de todos ellos deviene esencial para que este exigente proceso se desenvuelva de manera satisfactoria.
Mayor carga de trabajo
Verdaderamente, la distribución de retorno es un reto en sí mismo. Después de todo, darle la vuelta a la cadena de suministro siempre implica gastar tiempo, trabajo y dinero extras. Que todo salga como es debido requiere de una planificación minuciosa que se adelante a un hecho ya de por sí incierto.
Afrontar la logística de retorno en un mercado globalizado
Una economía digitalizada y globalizada como la nuestra ha llevado a que los envíos internacionales resulten extremadamente frecuentes. Ahora bien, cuando las mercancías enviadas deben retornar, será necesario volver a adaptar la logística a todas las variables propias del transporte transfronterizo (aduanas, tipos de cambio, husos horarios, etc.).
Cumplimiento de las normas medioambientales
La normativa en materia de sostenibilidad es cada vez más abundante y rigurosa. Esta regulación afecta muy especialmente al transporte y reciclaje de la mercancía. Para mayor dificultad, su observancia no puede mermar la rentabilidad de todo el proceso.
Agilizar los tiempos de recogida de la mercancía
Uno de los mayores desafíos en esta etapa es acortar todo lo posible los plazos de recogida, cambio y reembolso. Evidentemente, que las mercancías hagan el camino de vuelta cuanto antes acaba beneficiando a todos. Es por ello que los mejores operadores logísticos diseñan rutas y estrategias capaces de acelerar todo el proceso.
Cumplir las expectativas del cliente
Con el auge del comercio electrónico, la retrologística actual es mucho más exigente que hace una década. Al fin y al cabo, el cliente digital quiere mucho por muy poco. En consecuencia, hay que acelerar el proceso, sin que ello le suponga costes adicionales al comprador.
Gestión experta de la imprevisibilidad
La irregularidad de los flujos de devoluciones hace que resulten impredecibles. Ello hace que planificar de antemano los recursos necesarios resulte más complicado. Asimismo, la incertidumbre propia de la logística inversa nos lo pondrá más difícil a la hora de mantener unos niveles de stock óptimos.
Sin lugar a dudas, transformar los retos de la logística inversa en oportunidades para tu negocio es posible cuando trabajas con un partner logístico como Logisfashion. Déjalo en nuestras manos y benefíciate de una gestión personalizada e integral que lleve a la cima la satisfacción de tus clientes.